Si te detuviera en tu camino hacia algún lugar y te preguntara porqué decides caminar sobre tus codos sangrantes en vez de sobre tus piernas, estoy seguro que te enojarás conmigo, pues no comprenderías mi observación.
Si te preguntara sobre porqué eliges comer acostado boca arriba entre ahogos y lágrimas, estoy convencido que me escupirías la comida a medio masticar echándome de tu lado.
Si te llamara a reflexión sobre el cinturón apretado que cada mañana sueles ponerte para atravesar el día, es muy probable que te quedes mirándome con los ojos llenos de furia.
Si te inquiriese sobre las espinas que llevas a tus costados, que no dejan de pinchar a cuantos se te acercan, me doy cuenta que me empujarías fuera del escenario con los dientes apretados y las muelas rechinando.
Si tocase el cristal en el que te has encerrado para evitar ser dañado, estoy seguro que aullarías como una alarma y meterías más la cabeza entre tus brazos.
Si lo sé con tanta claridad es porque solía habitar el limite interno de tu reino hasta que un día el aire se hizo escaso para estar los dos.
Al salir esa tarde, recuerdo, vos preferiste quedarte.
Ahora yo he decidido quedarme aquí al costado; esperando.
No observaciones, no miradas, no sonrisas.
Quieto, de respiración apacible, mente clara atenta a la eventualidad, expectando, quieto para caer de a poco en el sueño de tu olvido y formar así parte del paisaje inerte que rodea tu perfecto globo de soledad.
Entonces, un día, cuando pienses todo muerto a tu alrededor y salgas a tomar aire fresco, sacudiré mi sopor y nos volveremos a encontrar.
Mientras, el tiempo es vasto y la paciencia es mucha.
Hasta siempre, recita mi mente; hasta siempre...
8 comentarios:
Pepe Griyor:
¡Obvio que si uno le dice a otro todas esas cosas va a acelerar la respiración únicamente para que no alcance el aire y uno de los dos deba abandonar la burbuja! (¡A mí, Roberto, dejame comer panza arriba que así digiero mejor!!!)
A ver: dudo que el personaje, si alguna vez se digna abandonar su burbuja, salga en pos de Pepe Grillo. Dudo. Seguro corre en busca de alguien que hable menos, respire menos o que le guste el aire contaminado, enrarecido.
Muy bueno el texto. Eso sí, "espectando", no lo encontré por ningún lugar.
Abrazo.
Ponerse en victima siempre cae mejor, hay mejor actuacion,mejor rol y si es con lagrimas y palabras de gruesos calibres,mucho mejor,en este caso, entre victima y torturador,despues de las torturas sutiles...de romper el cristal se puso a un costado..a ver pasar el cadaver de su victima,pero con la esperanza de volverse a encontrar, pero el cristal ya esta roto...y con poxiram no se arregla, ya fue.Modestamente.
Es algo que me es un poco difícil escribir. Mas creo comprender el estado en su totalidad.
¿Buscas hacer reaccionar?
Algo me apretó...
Un saludo.
Sergio: Gracias por la corrección antes que nada, me hace bien que estés atento y aprendo. Respecto del texto, un poco de eso se trata, de un punto de inflexión entre una historia previa nada y un presente que no contiene la relación por ningún lado… el reino de las imposibilidades más allá de las intenciones.
Un abrazo Sergio.
Mauro: Tan simple como eso: “ya fue”, tan sencillo de decir, y aparentemente de notar, sin embargo, mucha de la literatura romántica se vería reducida a la mitad si el universo de los sentimientos fuese tan fácilmente domable por las razones.
A veces se puede ver, y entender, pero no siempre se puede actuar en consecuencia, aunque duela… el corazón tiene tiempos diferentes de la cabeza, a veces hace falta paciencia o, al entender el “ya fue”, cerrar capítulos y seguir avanzando.
Beso grande.
Rammses: En el relato, quien lo cuenta, me parece que ya ha intentado varias maneras de “hacer reaccionar”, pero a esa altura ya se ha quedado sin herramientas, solo le resta esperar, pues haga lo que haga no será para mejor… o al menos eso es lo que él cree.
Saludos.
Entiendo, la esperanza siempre se guarda muy en el fondo y podría devenir en un punto de quiebre...
Que tema, me ha pasado.
Abrazo.
Rammses: Quedarse y esperar en una espera esperanzada y sin cotas de tiempo. Difícil empresa, sólo posible con bastante cariño para llevarla adelante.
Si uno no quiere, no es posible.
Un abrazo.
Hoy domingo, plomizo, húmedo, un poco frío, entré en tu blog y leí esta entrada. Es vieja (ahora todo es viejo después de 1 semana, horrible...aunque "trendy"), pero me toca de cerca. Que fea sensación la de quedar por fuera del cristal y no poder hacer nada por el miedo del habitante interior a que se rompan y quede a tu merced....Merced? la fantasía de que el otro modifique tu existencia tortuosa y disminuya tu sufrimiento.
Texto iluminado pero doloroso. (se oyen aplausos nuevamente)
Infinit Pix: Simpre hay un riesgo de herir o herirse al acercarse a quien sea, de todos modos, cuando ciertas relaciones se han desgastado, y el camino andado empieza a transofromarse en una quebrada de tanto pasar por los mismos lugares, es cuando a veces, hace falta dar un paso al costado.
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