miércoles, 30 de julio de 2008

HASTA LA PROXIMA VEZ


Todos tenemos la capacidad de dolerle a los demás en nuestra ausencia
Dolor del que muchos huyen
Del que escapan al tiempo que lo buscan en sus más profundos deseos
Y es que amar tiene un precio.

Te abracé con ganas y sin reparos
Desde entonces hay un espacio que reclama tu presencia
Un universo y sus planetas cabrían en mi pecho
Pues ahora siento no poder sentirte.

A veces me engaño prendiendo haberme equivocado
Me digo que nada debiera haber pasado
Pero dentro sé que refiero esta tristeza
Que me recuerda que estoy vivo palpito y respiro
Hasta la próxima vez.

martes, 29 de julio de 2008

PURA FICCION


- Yo no soy Dios, ellos nos ponen en ese lugar- me dijo mientras se le humedecían los ojos.
- Cuando vino el presidente hicimos una marcha, hubo cerca de trescientos profesionales de la salud quejándose por las condiciones del Hospital de niños. ¿Vos lo viste en alguno de los medios?... yo tampoco, ellos eligen que te muestran y que no.
- Con el conflicto del campo estuvimos tres días sin oxígeno en el Hospital, se me murieron un montón de chiquitos…
- Antes ya habíamos estado sin oxigeno por cuatro días…
- Si tienes a tres niños delante tuyo y tienes que decidir a quién pones la máscara y a quién no. ¿Cómo eliges?, ¿Al que tenga más posibilidad de sobrevivir?...
- Tengo la suerte de estar en esta época con licencia, para julio mis compañeros se vuelven locos.
- Te hace mal.
Yo he ido, yo sé lo que es el baldío en el que atienden a los niños de Santiago del Estero, he visto a los chicos con el suero puesto sentados en el piso con tierra, las puertas arrancadas de los goznes, los baños sucios, la gente esperando en el pasillo junto a camillas y niños acostada en proceso de internación ya que no hay habitaciones suficientes. También sé que han recibido buenas sumas de dinero de diferentes ONGs, y que ahora hay un nuevo hospital aún por ser inaugurado, ya que si bien la parte arquitectónica esta completa, no tuvieron en cuenta criterios elementales para la distribución de los espacios según las demandas de funcionamiento de un hospital, es decir, están picando y rellenando de nuevo.
Ningún medio ni provincial ni nacional quiere cubrir NADA de esto.
Las noticias se parecen a los índices del INDEC, el cuál me recuerda a la novela 1984 de George Orwel, donde un estado totalitario decía que la ración de chocolate había subido de 5g a 3.5g y que la gente debía celebrar la grandeza de sus benefactores.
La misma novela también decía: “En una época de mentira universal, decir la verdad constituye un acto revolucionario”

jueves, 24 de julio de 2008

TRES LECCIONES


Acaricio al gato mientras miro su perfecta cara, él ronronea avisando que lo que hago lo hago bien, la tarde se va deslizando, la música de fondo y el sándalo en el aire, mi otro gato me mira desde el costado del sillón y ante una mueca mía se sube y acomoda al lado del primero sobre mis piernas, coro de ronrones y el tercer gato que no tarda en llegar y unirse al grupo.
Nunca pensé en tener tres gatos, fue una casualidad, el negro se había ido por los techos y en el transcurso de los catorce días que estuvo fuera le llegó un rayado reemplazo, el cual no fue bien visto a su retorno, pero que con el tiempo se aprendieron a tolerar y, porque no, a disfrutar.
El tercer gato es gata y tiene trace años conmigo.
A veces me quedo como extasiado mirándolos, me seduce su manera silenciosa de desplazarse, yo a veces camino sin hacer ruido, no lo hago a propósito, pero termino asustando a aquellos que no me oyen venir.
Se que los gatos tienen uñas y dientes afilados además de un carácter no tan gregario como los perros.
El gato se deja cuando él quiere de la manera que él quiere, será por eso que a mucha gente no les gustan, será que temen tener un predador en casa, tal vez teman transformarse en persas.
El perro es más predecible, aunque hay razas que lo son menos.
Nos respetamos, nos disfrutamos.
Tengo la profunda convicción de que los gatos no son míos, sólo viven conmigo y eso me llena de satisfacción.

SI ME PERMITES


Si saltas de todos modos me haces un lugar junto a tu cuerpo.

Si decides ignorar los consejos que previenen y los carteles a los costados sólo así me haces posible.

Se que es un apuesta que tiene como premio la incertidumbre, apuesta cuyo riesgo pretende la mayoría es demasiado.

Saltas a la nada, al vacío, a un espacio que sabes no existe y sin embargo lo construyes.

Lo construimos.

Y solo así somos.

No antes, no después, solamente durante.

Desafías los prospectos, niegas las voces de afuera y también las de adentro.

Y entones salto caigo y salen lágrimas de mis ojos que suben con el viento.

El hilo de agua se va haciendo río en la caída, solo tus manos me sostienen y nada nos detiene aire abajo, aire arriba.

Te miro y me miras y el tiempo se detiene.

Mi corazón late alocado y el vértigo disimula la humedad de mis ojos, que siendo de otra índole, se abre paso desde mis entrañas.

Húmeda confusión en el estampido de la fresca agua que marca el final previsto para un comienzo inesperado, el de llevarte siempre prendido en mi alma.

martes, 22 de julio de 2008

CRECIENDO


La misma puerta de entrada al edificio, mismo color, sólo que mas vieja.
Las escaleras eran iguales, los mosaicos de los costados me sorprendieron, no me acordaba que fueran así.
Volviendo al departamento donde me crié hasta cumplir los catorce años.
Volviendo a los treinta y cuatro.
Todo se veía casi igual, excepto que más chico.
Me preguntaba como iba a ser ese momento, y al estar parado frente a la puerta del departamento me asaltó la idea de algo pudiera estarme aguardando, algo que había dejado hace tiempo, encerrado, hecho de resentimientos, malas experiencias, miedos y angustias.
Algo con vida propia.
La llave giró sobre el tambor, la puerta cedió con un sonido familiar. Adentro estaba oscuro. La perilla de luz donde siempre.
De pronto no me había ido nunca, era todo muy similar, pero habían hecho modificaciones en la arquitectura. Me sorprendió el espacio pequeño en el que dormíamos con mis hermanos. La cocina ahora era grande, habían techado al galería uniendo la cocina original con la pieza de planchado. El patio tenía otro color de cemento en el suelo. Los techos donde vagara parecían mas chicos. Luego, la pieza de mis viejos y el balcón. La vista mas bella de mi infancia de nuevo frente a mí.
Me tiré panza abajo en la cama y mi cara quedó enfrentada con las baldosas blancas con manchas negras y negras con manchas blancas, en damero. Encontré el mismo significado para las mismas manchas en el mismo lugar.
De los demonios, nada.
Roté perezoso sobre mi mismo, quedé mirando el techo, escuché a la distancia el sonido de los trenes. Sólo había dejado felicidad entre estas paredes y ahora se me hacía presente.
Pensaba que me había ido avergonzado, escapando de las malas experiencias, de las incomprensiones, que había huído más que mudado de una casa a otra. Cuán equivocado estaba.
Nada había quedado encerrado, porque me había llevado todo conmigo.
Demonios que me comían las entrañas, que cercenaban el sueño, que quitaban el aliento, que hacían de las miradas algo esquivo, que pesaban, que dolían, que gritaban y demandaban, sucios, rasposos, odiosos, insistentes.
Míos.
Mirando el techo, con el tiempo estirándose lánguido en la siesta, empecé a sonreír mientras se abría la profunda conciencia de estar rodeado por esa antigua compañía.
Ya no había de que escapar, mis viejos demonios eran ahora mis grandes amigos.
Había crecido.

martes, 15 de julio de 2008

DESTETE


Seis personas charlando en una sobremesa. A, C, N, L, mi hermano y yo.
Bueyes perdidos, política y comercio exterior, las relaciones de pareja y la experiencia de cada uno.
¿Cuándo es el memento del destete?, pregunta mi hermano.
No me confunde verte de esa manera.
Nos convencimos de que hay fragilidad y despido en cada gesto que haces.
Dices estar cansada y todos te creemos.
Los nietos están empezando, vos pareces estar en otro lugar de la curva.
Pero no queremos ver, no nos queremos dar cuenta, nos hace mal.
Uno piensa que deja la teta el primer día en le jardín de infantes, la ida a estudiar afuera, formar una nueva familia, llamar familia a otra gente.
¿Cuándo es el destete? Preguntó mi hermano y él mismo se contestó… se contestó para todos los presentes.
Hoy fuimos a caminar con mi veja, está cansada, no llegamos a la equina, intentemos, intentaste, paciencia, más tarde volveremos a intentar.
Mi vieja siempre ha sido una mujer muy fuerte, de las que no muestran debilidades. Esto, para ella es durísimo, pues incluso ella se había convencido de su invulnerabilidad.
Se enoja con ella, no quiere que la veamos así, no quiere verse así.
Y mi hermano nos dijo a los presentes: “Nunca es tiempo del destete”… y luego agregó “Tengo cuatro hijos y una esposa, y sin embargo estoy aquí deseando que mi mamá no se muera”…
Mi hermano es sabio, con esa sabiduría de pocas palabras y mucho corazón, de esa clase que no necesita palabras rebuscadas para brillar como el sol.
Hubo un silencio que permitió llevarnos cada uno el regalo.
Luego la vida siguió como siempre, pero diferente.

viernes, 4 de julio de 2008

EL FIN DEL MUNDO


Hubo un día en que ocurrió el milagro.

El que trabajaba siempre, siguió en su interminable tarea, pero en su mente, en ese instante, hubo un momento de contemplación, de esos que no se pueden explicar, como cuando te quedas mirando fijo la pared y aparece dentro de uno esa sensación de recogimiento, de no necesidad, de atemporalidad, de placentera nulidad.

El que tenía hambre desde hace mucho, siguió pleno de la corrosiva sensación, pero en ese momento se olvidó, o se acostumbró, y una sensación placentera ocupó el lugar que hace tiempo no encontraba.

El que lloraba, siguió haciéndolo, pero en ese instante fue diferente, porque sus lagrimas de pronto tenían un sentido que hizo que la satisfacción apareciera donde antes nadie se hubiera imaginado que podía estar.

El que odiaba, continuó odiando, implacable, imparable, ciego sordo y mudo, pero en ese instante, algunas cargas se movieron de lugar, algo de aire entró por la ventana de su conciencia, y se sintió amado por lo que duró ese suspiro.

El que rezaba siguió adelante con su monótono cántico, pero en ese espacio de tiempo el musitar devino en el sonido de las puertas del cielo que se abrían delante de él luego de haber abandonado la esperanza tiempo atrás.

El que soñaba y desesperaba siguió haciéndolo, pero en ese momento sus sueños se presentaron con el dulce del panal donde a diario encontrara la hiel de la no posibilidad de concreción.

El que amaba sin ser correspondido continuó atrapado en su eterna tristeza, pero por un instante fue rozado por un amor más profundo que el que pudiera imaginar, y aunque no lo entendió ni lo entendería jamás, gozó y se dejó sentir.

El que tenía miedo siguió temeroso de todo, pero en un momento inesperado se sintió seguro, y aunque fue un segundo, fue mucho pues las hostilidades y peligros se habían esfumado mostrando su esencia volátil.

Así todos fueron tocados, todos a la vez, y el mundo entero dio un giro, una cambio, 360 grados, iniciando un nuevo orden, completamente distinto.

Pero quiso el destino de las cosas y las revoluciones que al estar todo en tal sincronía, nadie se percatara del cambio, y cada cual continuó con sus vidas como si nada hubiera pasado.

Sólo cuando se hacía el silencio en sus esquivas intimidades, aparecía esa conciencia profunda, sólida, perdurable, confiable, para luego desvanecerse detrás del sonido del canal de las noticias.

martes, 1 de julio de 2008

NECESARIO


A la cama en la que duermes no le da igual, al aire que respiras no le da igual, a la mascota que acaricias no le da igual, a la ropa que vistes no le da igual, a la casa que habitas no le da igual, a mí no me da igual, a los que te conocemos no nos da igual, ni a los que te conocerán, a los espacios que habitaste, a los por conquistar, al agua en la que te bañas, al sol que te calienta, al universo que te contiene, al universo que contienes tampoco no le da igual.
Sólo falta que lo creas así.
Sólo hace falta que lo aceptes.
Sólo necesitas dejar de pretender para empezar realmente a saber.
Date cuenta.

TODO EL PLACER


Una “Sprite Zero” te ofrece: 100% de sabor sin una caloría. Frescura sin engordar, limón sin semillas, dulce sin caries, gas sin olor,
placer sin culpa, y es de Coca Cola Company, garantía en bebidas gaseosas.

Los postrecitos “Ser” ofrecen: flan sin huevo, son cremosos sin crema, con caramelo sin azúcar, te llenan sin hacerte engordar, y tienen la garantía de la Serenísima y Danone líderes en productos lácteos.

Las galletitas Hogareñas salvado ofrecen: Menos calorías en la misma porción, menos sal con todo el sabor, omega tres sin grasas trans, fibra con energía para ir a trotar, una vida sana sin pagar de más, y tiene la garantía de Bagley referentes en el mundo de las galletas.

Las frutillas en ivierno ofrecen: color fuera de estación, tamaño sin sabor, brillo sin vitaminas, más jugo sin textura y tienen la garantía del frigorífico en el que compra tu verdulero de confianza.

Vos me pides: Relación sin responsabilidad, amor sin correspondencia, sexo sin cariño, afecto sin compromiso, compañía sin presencia, muchas idas y ninguna vuelta, demandas sin posibilidad de reclamos, esperas sin horarios, acuerdos sin documentos.

Y yo tengo una ganas mortales de churro con dulce de leche y chocolate caliente.