miércoles, 20 de mayo de 2009

DONDE CAE EL LAZO


Cuando él perdió el interés en las salidas con amigos y en las reuniones sociales a ella se le fue el amor, pues al darse cuenta que le satisfacía estar con él en presencia de otros y no tanto a solas, arribó a la conclusión de que estaba más encariñada con poder mostrarse con alguien como si fuese un trofeo que tenerlo para charlas íntimas o los interminables bodrios de películas, charlas con vino y fuego en la hoguera.
Cuando ella se sintió completa al dar a luz, a él se le fue el amor, pues se dio cuenta de que quería una esposa y no una madre, además ella, en su completud, no le dejaba lugar para permanecer, así que partió una tarde dejándolos para disfrutar de su simbiosis, ya los abogados se encargarían del resto.
Cuando él cambió de trabajo, al otro se le fue el amor, pues ya no habría viajes a playas paradisíacas, países dónde practicar su inglés, caros restaurantes y eufóricas noches con químicos y alcohol, a él ya no le importaba nada de eso que él amaba desde el primer día. Tal vez estaría madurando, pensó, mientras llenaba la maleta y revisaba las alternativas que tendría el viajar solo nuevamente.
Cuando ella le contó todo a su familia a ella se le fue el amor, pues le encantaba amarla en secreto, tentar las chances, acecharse en la oscuridad, hacer el amor tapándose las bocas, pasar por amigas, salir con amigos, que nadie supiera, que fuera algo de las dos, que la desearan al pensarla sin dueño, sin dueña. Una amarga charla, un vino dulce y la puerta abierta a otras experiencias.
A veces se lanza un saco hacia el perchero, pero este queda agarrado del respaldo de la silla, tan bien acomodado que cualquiera puede pensar que fue puesto ahí adrede.
¿Vos y yo, de dónde estaremos enganchados?

10 comentarios:

Unknown dijo...

llegué priiiiiiii.
Mi querido amigo, tantas veces el lazo cae en el sitio menos planificado.....y seguramente tu y yo estaremos enganchados desde la sensibilidad.
Y las causalidades que reunen a estas almas que describís, son tan reales frecuentes como los respaldos puestos allí para que el angel que nos mira apoye sus alas en una pausa del vuelo.
Te espero siempre, besos

Escribir, coleccionar, vivir dijo...

Muy bien planteadas todas las posibilidades. Es muy increíble pensar que a veces estamos prendados de "las cosas" del otro y no realmente del otro. He vivenciado el primer caso, esa tranquilidad de tener a alguien para conformar al mundo y sus prejuicios con la compañía de una pareja, mientras que, puertas adentro, sentía el aburrimiento mortal de estar con un ser que solo funcionaba como acompañante social. Es duro reconocerlo, pero los años han pasado y tu texto me ha servido para reflexionar en el asunto.
Un beso y un aplauso por tu vuelta.

YOR dijo...

Paola: Quién podría decir desde dónde estaremos enganchados!, jajaja lo importante es que lo estamos, que algo ha ocurrido y ese algo ha ahecho que el otro entre en nuestras vidas para hacerla más linda, mas interesante, enriquecedora...
Que bueno estar enganchados, aunque sea del meñique ¿no?
He estado borrado pero ando volviendo, ya voy a visitarte a tu casita virtual.
Un beso grande.

Paula: Gracias por el aguante!, aquí estamos de vuelta y de a poco y lleno de felicidad de leerte y que me leas.
Por lo general uno no sabe desde donde está enganchado hasta que una crisis golpea ese punto nodal, entonces nos despertamos como de un sueño y decimos ¿de esto estaba enganchado? ¡que mal!...
Pero te voy a contar un secreto, lo que en apariencia nos engancha y que aparece diáfano a la razón es sólo una cáscara de lo que no se ve y que también nos vincula, es por eso que ante una ruptura lloramos como chanchos aunque la razón tenga claro que la cosa no va más.
¿De dónde nos enganchamos? Nunca se sabe, eso si, hay lazos que nos atan mas fuertes que otros.
Un beso y gracias por estar

Jorge R. Etchepare Mac Eachen dijo...

Hola Yoryi!:
Gracias por tu comentario en mi Blog, y por la observación atenta que tienes hacia mis movimientos interiores y su comunicación.
Ahora bien, si es cierto que me gustó tu Post, no me quedaré sólo en ello ni en comentarios obvios, de sobra me conoces.
A propósito de el enganche entre personas, reflexionando, observando, y experimentando, he notado que para que la firmeza en las relaciones esté presente, incluída la felicidad y alegría, que no son lo mismo, aunque suele asimilárselas como tales, son necesarios algunos componentes no importando la proporción de ellos para el buen resultado final, que no estamos hablando de repostería.
Pero bueno, eso lo podrás leer cuando publique la segunda parte de Ay cómo me duele quererte como te quiero!, en mi Blog.
Ahora estoy escribiendo mi próxima publicación: Síndrome de Mitirini, donde analizo la separación evidente de los dos sexos.
Te dejo un besotón, y mi opinión sobre tu escrito:
todo bien, las posibilidades de enganche...miles, el secreto para la no frustgración, creo, pasa por tenerlo claro, y asumir que vendimos la felicidad por el precio que nosotros mismos elegimos; por lo tanto, no hay derecho a la tristeza ni al desaliento, y sí lugar para emnprender una nueva búsqueda y nuevo enganche, ya que parece ser lo único que a tus protagonistas les interesa, o interesó.
Jorginho

YOR dijo...

Jorginho: Que bueno tenerte posteando en mi blog! Bienvenido.
Estoy ansioso por leer lo que prometes y sin ninguna duda he de poner algún comentario ya que me haces mover la cecera...
Touché, mis protagonistas parecen no tener sentimientos en la manera en que se expresa cada una de las cuatro separaciones... lo que hace pensar: ¿Hubo realmente enganche?... y digo yo ¿habrá habido realmente enganche en cada caso?... en fin, yo creo que los personajes piensan que sí... Cada cual se engancha como puede y como mejor le sale... ¿o tendremos que establecer una serie de reglas para discriminar enganche de otras variantes del narcisismo de cada cual?... preguntas, preguntas... que bueno es compartir esto con vos.
Un abrazo grandote.

sergio dijo...

Me parecía que había publicado algo. Y no está. Bueno, según creo su texto me hizo recordar una canción de Erica García (¿qué fue de Erica García?) que dice "el futuro y el amor nunca van de la mano" Y maldita gracia que me hizo. Será así?

RMS dijo...

Simple y claro. Acertado como siempre. Los vericuetos de las relaciones humanas que a veces no parecen tan humanas.
De cuando nos domina el egoísmo y solo queremos ver y retener eso, esa luz o espejo que brilla, sin ver el resto. Queremos satisfacer siempre nuestras ansias y necesidades pero que hacemos por el otro?...
Ah... revelador como siempre.
¡¡¡UN PLACER VENIR A CAVILAR!!!

También estoy renaciendo de las cenizas.

Abrazo, Yor!

YOR dijo...

Bienvenido una vez más! Una vez escibí "si tuvieron que cambiar tanto para estar juntos; ¿De quién se enamoraron?".
Jodida palabra "amor" te puede llevar toda uan vida definirla y abordarla, pero ten la certeza de que cada vez que creas tienes la definición correcta es cuando más equivocado estarás...
Un abrazo grande y a renacer carajo!

RMS dijo...

Y es que tiene que ser jodida porque sino ¿Cómo aprendemos?. ¿Cómo valoramos?. ¿Cómo vivimos?, pero bien, no haciendo como que vivimos.
¿Se enamoraron de ellos mismos?.

Este renacer me ha costado pero mucho pero muy satisfactorio. Nos estamos haciendo grandes!!! que fatalidad! jajaajaja
Placer, abrazote!.

YOR dijo...

RAMMSES: El problema es que muchas veces no sabemos de donde nos enganchamos hasta que llega la crisis que nos confronta con nosotros mismos...
¿Cómo saber si amamos realmente sino a través de permitirnoslo y jugarnos a hacerlo?