lunes, 21 de abril de 2008

INCOMPLETO


Voy a sembrar duendes en la maceta, pues las plantas que ya están no dejan lugar para otras y nada crece en la sombra.

Siembro duendes que las cuiden, que entretengan mis gatos en las largas horas trabajando lejos de allí.

Duendes que crezcan, conversen y proliferen para que al volver pueda poner mas platos y así dejar de comer solo cada noche.

Duendes que esperen mi regreso, que me extrañen, como los gatos, como las plantas, como extraño las tardes compartidas, como yo te extraño desde esa última charla inconclusa que me llenó de ausencias.

6 comentarios:

Luiscba dijo...

puedo ofrecerte un retoñ de mis duendes y tal vez pedirte a cambio un retoño de los tuyos asi parte de nosotros estara alli mas cerca del otro compartiendo el mate de otoño una abrazoooo

YOR dijo...

Acepto la propuesta!, jajajja un abrazo por ahí también.

sergio dijo...

¿qué pasa?, ¿se me le ha metido el otoño en el alma? ¿qué hacer frente a esto? la salida de los duendes es bastante ingeniosa. Ojalá que esos duendes cumplan su función mientras regresa su ex interlocutor, el que lo dejó con la palabra en la boca....

Una cosa: “que entretengan mis gatos en las largas horas trabajando lejos de allí” Ummmm es muy ambiguo el uso del gerundio (y se lo digo yo que uso y abuso de ese verboide) Perdón, pero no puedo evitar el comentario choto.

YOR dijo...

Sergio: Las largas tardes frescas con nublado y viento frío me avivan las sombras del alma para entibiarme el corazón puertas adentro, ahí donde esqueletos y duendes son parte de un arsenal mucho más grande...

sergio dijo...

Guau!!!!

A eso le llamo yo comentar!!!

Qué bueno que haya gente con arsenales completos....

Mi repertorio es mucho más limitado: tres o cuatro puteadas y algunas lagrimitas. Eso es todo.

YOR dijo...

Sergio: Gracias!, ahi veré de hacer lugar a esta literatura y ni bien empiece te cuento...